Cuando empecé este blog lo hice por una preocupación que me inquietaba: no sabía si mi piel se había arrugado de un día para el otro o si estaba profundamente deshidratada. Empecé un itinerario de búsquedas, información, pruebas con diferentes cosméticos (creo haberlo dicho, mi piel es sumamente reactiva y no le sienta bien cualquier producto, por eso siempre pruebo antes de comprar y le doy 24 horas a mi piel para ver cómo reacciona).
Hace ya algunos meses, 7 meses aproximadamente, pasé por una tienda de cosmética biológica. Me recomendaron el aceite de argán. Sistemáticamente, cada mañana y cada noche, luego de limpiar mi cara, puse unas gotitas sobre mi piel. También a veces agregaba unas gotitas de aceite de aguacate, que es muy nutritivo. Al mes empecé a ver resultados, a los dos meses mi piel mejoró mucho y la mejoría fue in crescendo; evidentemente no me había arrugado sino que estaba padeciendo una deshidratación muy profunda. Esas líneas que habían aparecido en mis mejillas desaparecieron y no sólo eso, también sentí la piel más reafirmada.
Es increíble pero mientras voy escribiendo esto siento que mi mensaje es idéntico al de algunas publicidades de cremas milagrosas (esas que valen carísimas, mi pequeño aceite apenas si costó 10 euros) Debo decir también que sólo usé este aceite, combinado como dije, algunos días con el de aguacate. Hay que ser pacientes y muy muy metódic@s para ver los resultados. Pero los resultados se ven.
El aceite que compré es biológico, de agricultura ecológica, de un laboratorio español, según me comentó la vendedora de la tienda. Lamentablemente la etiqueta se ha borrado completamente, razón por la cual ya no tengo la referencia de la marca. ¡Prefiero que inviertan en calidad del aceite antes que en etiquetado! Aunque, eso sí, les juega en contra, porque a la hora de recomendar, no podemos visualizar la marca. No obstante, en cualquier tienda de cosmética ecológica, podéis pedir asesoramiento y cualquier aceite de argán de confianza, estoy segura, será efectivo.
Importante: el aceite actúa muy bien sobre la piel húmeda, por lo tanto cuando os lavéis la cara dejaros unas gotitas de agua en el rostro y allí aplicar las gotitas del argán.
Dato muy positivo: como se utilizan pocas gotas ¡dura muchísimo!
Otro buen dato: ¡es excelente para puntas abiertas del pelo o para darle brillo a las mechas! Funciona como un excelente sérum para el cabello.
Conclusión: He vivido este aceite como una verdadera cura para mi piel y un gran tratamiento de belleza y de juventud.En ocasión me referiré también a otro hidratante de primera categoría: el aceite de aguacate.
¡Un post optimista! ¡Hay esperanza para nuestra piel y sin la necesidad de recurrir a la industria cosmética tan atestada de parabenos y productos químicos!
Y vosotr@s ¿Habéis probado el argán?
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